En el mundo, más de 230 millones de menores viven en zonas afectadas por conflictos armados. La situación de inseguridad que provocan dichos conflictos, unida a contextos de pobreza y vulnerabilidad, hace que los niños y niñas sean blancos fáciles para ser reclutados como menores soldado o perciban como su mejor opción unirse a un grupo armado para soportar económicamente a su familia.
En Colombia, el reclutamiento forzado de niños y jóvenes ha sido uno de los métodos violentos más usados en el marco del conflicto armado interno. Según el Centro Nacional de Memoria Histórica, se han documentado 17.778 casos de reclutamiento de niños y niñas, durante más de 56 años de guerra en el país. En los cuales los niños suelen ser utilizados como mensajeros, detectores de minas, cocineros o como fabricantes de bombas. Las niñas, en su mayoría, son obligadas a contraer matrimonio forzado o a convertirse en esclavas sexuales.
Hoy, 12 de febrero se conmemora el Día Internacional de las Manos Rojas, una fecha para recordar a todos los niños que son reclutados por grupos armados y que son privados de su derecho a tener una infancia digna y propia de su edad. En Genesis Foundation apoyamos esta iniciativa compartiendo 3 razones por las cuales tener acceso a una educación de calidad apoya a los niños a construir un proyecto de vida que los aleje de ver la milicia como opción de vida y prevenga que sean más vulnerables de reclutamiento:
1. Les enseña sobre el valor de sus derechos: la educación permitirá a los niños conocer sus derechos y, por ende, les hará reconocer lo valiosos que son y su autoestima se verá fortalecida. Además, al ser conscientes de que tienen unos derechos como personas, evitarán escoger o seguir todo aquello que pueda atentar en contra de ellos, convirtiéndose ellos mismos en vigilantes de su bienestar y el respeto a su dignidad, advirtiendo así a sus padres, cuidadores o maestros en caso de que sientan que alguna situación en su vida no es correcta.
El 20 de noviembre de 1889 la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Convención sobre los Derechos de los Niños, la cual Colombia la ratificó por medio de la Ley 12 de 1991. Esta convención tiene 4 pilares fundamentales: la no discriminación, el interés superior del niño, derecho la vida, supervivencia y desarrollo; y la participación
infantil.
En 2002 fue adoptado el Protocolo facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño relativo a la participación de niños en los conflictos armados en el cual todos los Estados Parte se comprometen a adoptar todas las medidas posibles para impedir el reclutamiento o el uso de menores de 18 años en hostilidades por parte de grupos armados.
Tomado de página oficial Alto Comisionado para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas https://www.ohchr.org/sp/professionalinterest/pages/opaccrc.aspx
2. Fortalece el apego: una educación de calidad brinda atención integral; esto significa que las familias de los niños también juegan un rol esencial en su formación y desarrollo. Cuando se trata de niños y niñas que nacen y crecen en zonas afectadas por la violencia, la familia es un factor de protección primordial, cuando la educación logra fortalecer el vínculo entre las madres o cuidadores principales y un niño, este lazo se convertirá en un escudo protector de los efectos negativos de la violencia.
Es con esta motivación que en Genesis Foundation implementamos Semillas de Apego, un programa de atención psicosocial que tiene como objetivo proteger a la primera infancia afectada por la violencia y el desplazamiento en Colombia, por medio del trabajo con sus cuidadores principales (madre, padre, abuelos, otro familiar cercano o tutor).
El programa ha tenido un impacto positivo logrando fortalecer la resiliencia de los cuidadores frente a los eventos traumáticos que vivieron en el pasado y de este modo lograr que lo transmitan a los niños y las niñas, previniendo alteraciones psicológicas y emocionales en su desarrollo cognitivo, social y emocional.
3. Desarrolla habilidades socioemocionales: en un contexto de violencia, es fundamental que se estimule en los niños el aprendizaje y desarrollo de habilidades socioemocionales que les permitan entender y manejar sus emociones, para poder alcanzar metas positivas y establecer relaciones sin conflicto con las personas de su entorno, entendiendo que la violencia no es el método ideal para la resolución de conflictos.
Cultivar estas habilidades socioemocionales en los niños hará una gran diferencia con respecto a su toma de decisiones y el trato a los demás, creando espacios de paz y tolerancia en las instituciones educativas, que trascenderán a sus hogares y crearán así un círculo de desarrollo sano para los niños en donde tienen la capacidad y pensamiento crítico para ponerse en el lugar del otro para comprenderlo y saber, por ejemplo, que ser parte de un grupo armado atenta contra su dignidad así como contra la de los demás.
En Genesis Foundation apoyamos el aprendizaje de valores y habilidades para la vida como vía para prevenir que los niños y las niñas desarrollen o reproduzcan comportamientos violentos, a través del programa Nube9 Global.
“Uno nunca puede pelear con sus amigos, porque los amigos son como nuestros mismos hermanos” Alexandra Iriarte, estudiante beneficiaria de Nube9 Global en Cartagena.
Así pues, la educación de calidad es un pilar fundamental a la hora de construir paz y proteger a los niños y niñas de elegir ser parte de un grupo armado. Tener la oportunidad de acceder a educación, les permitirá tener sueños y metas por las cuales trabajarán a diario y que serán beneficiosas tanto para ellos como para los demás. Desde Genesis Foundation te invitamos a unirte a la celebración del Día Internacional de las Manos Rojas por medio de nuestras redes sociales en solidaridad a la protección de los derechos fundamentales de los niños y niñas de Colombia.